Bad design
- Cuidado, el mal diseño puede destruirte.
Como estamos hartos de tanta belleza y tanto diseñador genial, vamos a intentar curarnos el síndrome de Stendhal y echar unas risas con una buena ración de esos esperpentos que tanto apreciamos los españoles. Y es que el mundo freak y bizarro, los adefesios, los monstruos, nos producen una extraña fascinación. Y esos engendros están por todas partes, se alojan en las tarjetas de visita, se meten en nuestros buzones, en nuestro ordenador, presiden fachadas y vallas de carretera. Y muchos de ellos los perpetran esos endiosados seres llamados diseñadores. Aberraciones cromáticas, absurdos conceptos, imágenes que expresan lo contrario de lo que pretendían, o simplemente no expresan nada inteligible.
Logos.
Hay una tendencia casi patológica a crear logos con ciertas connotaciones sexuales. ¿Están realmente ahí o sólo en nuestra cabeza? ¿Por qué nadie ve lo que nosotros vemos hasta que ya es demasiado tarde?
Símbolos fálicos por doquier, Freud tenía razón ¿diseñadores sublimando sus carencias gráficamente?.
Señales.
Buscan transmitirnos información esencial, pero a menudo fracasan. Hay personas que nunca ganarán al Pictionary.
Prohibido pisar toallas mojadas
No se debe silbar al…
Eh…. pasemos a la siguiente.
Atención, peligro de coches dentones de 30 toneladas explotando por el techo.
Menos mal que nos avisan que los renos se paran a olisquear los coches accidentados.
No en todos los sitios se puede usar el ordenador en la taza del váter.
Parejas gays se aman en las inmediaciones.
Esto es muy frecuente, los minusválidos corren peligro de rodar pendiente abajo hasta las fauces de un cocodrilo.
Sin comentarios.
Atención, peligro por…. ¿ranas?
Un parque con muchas actividades lúdicas.
Está muy bien que avisen que no hay que dar de comer niños pequeños a los cocodrilos.
Esta perversión sexual no la conozco.
A esto se reduce el sexo en Japón. Notad como el hombre sentado se transforma en mujer embarazada.
Portadas de discos.
Éste es un territorio fértil para el mal gusto. Unos pocos ejemplos:
No siempre una mala portada incluye mala música.
Ejemplos extraídos del museo de las portadas horrorosas.
Las páginas web
Ningún campo se libra de los criminales del sentido común.
Probablemente, esta es la peor página web conocida por el hombre. Mensaje no se hace responsable de los posibles efectos que os produzca si accedéis a ella. Irónicamente, es obra de una persona llamada «Bella».
Os reto a encontrar algún defecto del que carezca esta página. En mi opinión posee todos los posibles.
He dudado poner esta, y es que a veces lo correcto es enemigo de lo genial, y esta web tan brutal tiene un nosequé radical conmovedor. Bueno, quizá conmovedor no es la palabra.
Otro ejemplo típico que podemos encontrar en cuanto nos descuidemos.
Todas estos ejemplos, gracias a monolith.com., de su ranking 20 worse web design.
Varios.
Curiosidades que hemos encontrado por ahí.
Cuesta un poco descubrir cuál es tu símbolo de género. Pero al final da igual porque los dos están en la misma puerta.
Bonito bonito.
Alguien se ha dejado llevar por una furia creativa con las fuentes.
Naming
Objetos.
Aunque no es nuestro ámbito, hemos encontrado algunos ejemplos chocantes.
¿Sólo coincidencia?
Probad a borrar con esa goma.
La importancia de un buen slogan ¿es que no saben que la gente sólo tiene sexo en la cabeza?
Y para terminar uno de nuestros amados motivators, que expresa mejor que nada lo que pensamos de todo esto.
Y un enlace recomendable:
Una plantilla para marcar e señalar en los diseños los errores cometidos y, si la conciencia os lo ordena, enviarlo al culpable.
No dejéis de visitar la web http://www.design-police.org/. Simplemente leyendo sus plantillas, os servirá de recordatorio de los más frecuentes delitos contra el buen hacer diseñístico.
