Hay algunos trabajos que, sinceramente, los haríamos hasta gratis. Una campaña para wonderbra, un anuncio para nuestro equipo de fútbol, la imagen corporativa de El Buli (con investigación in situ obviamente)…
Pero hay otros que no hay dinero que los paguen. En Mensaje, después de tantos años, hemos tenido experiencias de encargos lo más variopintas, pero algunas todavía nos provocan pesadillas por las noches. Como estamos en verano y seguramente no os apetecen temas muy serios, os vamos a contar algunos encargos de opuesto carácter, de los más estimulantes a los más deprimentes.
Tened en cuenta que estos trabajos son muchos de ellos muy antiguos y no se muestran por estar entre nuestras obras más destacadas precisamente, sino por otras razones…
En primer lugar, un cliente para disfrutar.
EL CIELO (1).
Instimed es una clínica estética de alto nivel que, por su calidad y garantías ha sido elegida por muchos famosos para sus «retoques». Por ello, en nuestros últimos trabajos, pudimos utilizar la imagen de algunos de ellos para las promociones de este verano, como por ejemplo sendos Mister España y Miss España. Alegría para los ojos (y ojas, que diría la ministra de igualdad). Estos son sólo algunos ejemplos de los materiales que estamos trabajando con ellos.
EL INFIERNO (1)
Entramos suavemente en el primer anillo del infierno de Dante con este encargo que visualmente es bastante inocuo, pero que conllevó algunas circunstancias pintorescas. Se nos encargó un díptico informativo sobre un producto farmacéutico cuyo cometido es… detectar sangre en heces. El proceso de detección consiste en aplicar «una muestra de heces» con un palito en un papel, remover un poco, echarle un líquido reactivo encima y ver qué color adopta. Debíamos fotografiar todo el proceso, así que buscamos lo más parecido a la muestra que se nos ocurrió: un bote de nocilla. Las opiniones sobre la autenticidad de la consistencia y color de la nocilla aún son recordadas por los más viejos.
EL CIELO (2)
Otro agradable encargo relacionado con la carne, aunque esta vez en su modalidad porcina. Un restyling y un catálogo de delicias ibéricas que nos hicieron salivar y segregar jugos gástricos durante su maquetación. Entre los proyectos se encontraba un catálogo ¡con muestras auténticas incluidas! que, desgraciadamente, no llegó a realizarse. Aunque quizá sea mejor, porque en el departamento de diseño nos habríamos matado por hacer y catar ese diseño.
Otro encargo del que guardamos grato recuerdo pero ningún ejemplo gráfico es un packaging para mariscos (langostinos, gambas con gabardinas, etc…) La sesión de fotos estuvo abarrotada, y afortunadamente no hubo que repetir porque no quedó nada de las muestras.
EL INFIERNO (2)
Cuando el cliente te informa de que debes crear una campaña sobre la Onicomicosis ya te pones en guardia. Si después te enteras de que onicomicosis son enfermedades de las uñas de los pies ya empiezas a alarmarte. Pero cuando recibes la documentación, con las fotos que debes retocar en tu pantalla de 24 pulgadas terminas dudando de haber elegido bien tu profesión.
El resultado no es de los que nos llenan de orgullo, y si no fuera verano hubiera seguido sepultado en nuestros archivos y en nuestro subconsciente pero enfín, en Mensaje uno de nuestros mandamientos es la transparencia, así que esto es lo que salió publicado:
EL CIELO (3)
Y es que no hay nada mejor que recibir el encargo de comunicar belleza. Estas son un par de muestras de una campaña para Clínica Londres. No es tan duro buscar días y días en archivos fotográficos si el criterio de búsqueda es «cuerpo AND belleza».
EL INFIERNO (3)
Nos encargaron la imagen completa de un cicatrizante rápido, y cuando hubo que diseñar este díptico informativo tuvimos que lidiar con algunas de las imágenes más ingratas de photoshopear que hemos sufrido en esta vida. Muestran algunos casos de heridas y úlceras que, os prevengo, si sois sensibles o escrupulosos, no debéis ver. Por si acaso, lo he puesto oculto para que sólo los más valientes (o los más curiosos) tengan que verlo.
Glamour, sordidez, como diría Forrest Gump, uno nunca sabe lo que espera en el siguiente proyecto…
Y vosotros… ¿qué experiencias traumáticas o gratificantes tenéis?